Los mensajes subliminales tienen la intención de transmitir un mensaje de manera inconsciente sin que el sujeto sea capaz de captarlo de manera consciente y por tanto de decidir si recibirlo o no.
Este mensaje influye en el sujeto en el momento en que este tiene una respuesta en su comportamiento o pensamiento. De esta manera lo subliminal nos proporciona información de todo tipo.
Sin que nosotros lo sepamos estamos recibiendo y aprendiendo constantemente elementos que por lo general son de contenido morboso y cuyo único fin es aumentar el consumo de un producto o la propagación de una idea no aceptada por todos, ya sea por cuestiones morales, religiosas, políticas o de otra índole.
Los mensajes subliminales podrían llegar a tener un buen fin, pero consideramos que por lo mismo de ser un mensaje “oculto” no podría propagarse sin el consentimiento del estudiante o la persona en general, porque no hay un consentimiento, es decir, una aceptación a dicha información de manera consciente por parte del sujeto.
En conclusión, el mensaje subliminal no podría ser utilizado como por ejempo, para transmitir valores, ya que no es ético dicho mensaje pues se desacredita totalmente al raciocinio del ser humano.
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